El fraude tiene historia en nuestro país.
- En los años 30 se institucionalizó el fraude para evitar el pronunciamiento popular y, encima, se lo llamó “patriótico”
- Después de la revolución contra el pueblo de 1955, a la que llamaron “libertadora”, se prohibió, lisa y llanamente, que el Partido Peronista pudiera participar en las elecciones. En 1962 Framini salió electo gobernador, pero no pudo asumir; en 1963 el peronismo seguía proscripto..
- Los que pusieron a Onganía en el 66, y a Levingston y Lanusse más tarde, fueron los que no creían que las urnas fueran un buen método para elegir presidente. Entre ellos Mariano Grondona.
- Esos mismos “electores” fueron los que nombraron a los asesinos del proceso. Además pregonaron que las urnas estaban bien guardadas porque no creían que fuera necesario que el pueblo opinara.
Nótese que los grandes ejemplos de fraude fueron realizados siempre contra la voluntad popular y a partir del ‘55, siempre contra el peronismo.
Así que, compañeros, tengamos cuidado con el fraude, porque ellos ya lo han hecho y saben cómo intentar volver a hacerlo.
la nota es de Santiago Varela
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